Además de ser tendencia por los Juegos Olímpicos de París, el 5 de agosto Japón fue protagonista de las redes por el llamado ‘lunes negro’ o la caída de las bolsas más importantes de Asia por el temor a una posible recesión. De paso, eso ha impactado al peso mexicano ante el dólar, así que acá les explicamos qué es una recesión y cuál es la relación de la caída japonesa con el peso mexa.
Sobre todo porque lo que sucedió en las bolsas de valores de Japón, Corea del Sur y Taiwán está ligado con la situación económica de Estados Unidos, país que estaría en riesgo de caer en una recesión en plena campaña electoral por la Presidencia.
A su vez, lo que está sucediendo en Medio Oriente, el conflicto que podría escalar entre Israel e Irán ha puesto nerviosos a los mercados internacionales.
Antes de clavarnos con qué es una recesión, les contamos en breve lo que pasó en las bolsas de Asia, en especial en Japón, donde el Nikkei —el índice bursátil más importante de este país que no es otra cosa que un indicador o termómetro de la bolsa de valores— sufrió una caída considerable el lunes 5 de agosto.
Según medios como la Deutsche Welle, se trató de su segunda mayor caída histórica, en parte, por el desempleo en Estados Unidos, cuya bolsa (la Bolsa de Valores de Nueva York) cayó durante los primeros días de agosto por un informe acerca del mercado laboral estadunidense.
Este informe indica que es posible que Estados Unidos caiga en recesión, ya que la tasa de desempleo ha ido en aumento y en julio de 2024 tuvo las cifras más altas desde octubre de 2021 —o sea, se registró un mayor desempleo.
A su vez, la caída esta bolsa —una de las más importantes en el mundo— le pegó a las bolsas de Asia y he aquí los resultados: un ambiente de especulación reflejado hasta en las redes sociales y, claro, en medios internacionales.
Aunque, de acuerdo con especialistas de Goldman Sachs Group Inc citados por Bloomberg, existe un 25% de probabilidades de que en 2025 veamos una recesión en Estados Unidos y, que por el momento, hay “varias razones para no temer un desplome, incluso ante el aumento del desempleo”.
Una recesión es la disminución del consumo, la producción de bienes y servicios e inversión.
Hablamos de una recesión cuando durante dos trimestres al hilo —consecutivos— se registra una caída de la actividad económica de un país traducido en el aumento del desempleo, la baja producción de bienes y servicios y, por ende, el estancamiento económico.
Ojo, en la economía existen los conceptos de recesión —que como les contamos no otra cosa que el aumento del desempleo, la caía de la producción de bienes y servicios y estancamiento de la economía de un país durante dos trimestres consecutivos— y el de desaceleración que indica que la economía de un país crece lento.
También durante los primeros días de agosto se registró la depreciación —o el bajón— del peso mexicano frente al dólar.
Sí, después de una gran racha del superpeso, hasta el 2 de agosto la compra del dólar estaba en 18.17 pesos y su venta en 19.30.
Es decir, el tipo de cambio rompió la barrera de los 17 pesos. La directora de Análisis Económico en Grupo Financiero BASE Gabriela Siller explicó en su cuenta de Twitter (X) que hay varias razones por la que el peso mexicano tuvo este tropezón.
Una de ellas es la incertidumbre que ronda a Estados Unidos sobre una posible recesión en el corto plazo. Lo que ha sucedido en Japón y el rechazo al riesgo en México, además del miedo a que el conflicto entre Irán e Israel escale en Medio Oriente.
Al final, el lunes 5 de agosto el dólar arrancó cotizando en 19.56 pesos, oscilando entre el mínimo de 19.11 y máximo de 20.21 pesos por dólar, nivel que no se había visto, de acuerdo con Gabriela Siller, desde el 29 de septiembre de 2022.