¿Sientes que tu celular es muy seguro por estar bloqueado con tu huella digital? Yo también. La seguridad biométrica se vende como lo mejor de lo mejor, pero por ahí podría existir una técnica para vulnerarla mediante el sonido… ¡¿Quéeeeeee?!
Así mero: ¡vulnerar la seguridad biométrica gracias al sonido! Una técnica llamada PrintListener tiene la capacidad de recrear las huellas dactilares gracias al sonido que emiten los dedos cuando rozan una pantalla, lo que podría significar la posibilidad de clonar la huella digital de cualquier persona y acceder a la información que tenga protegida con ella.
Aunque en las películas nos han enseñado que la seguridad biométrica es peligrosa porque un criminal podría arrancarte el dedo o el ojo para abrir puertas de un laboratorio y robar información top secret, la realidad no es tan violenta… pero es igual de preocupante.
Una investigación llevada a cabo por científicos de China y Estados Unidos dio a conocer la técnica PrintListener. Revelan que mediante ésta es posible recrear una huella dactilar con el sonido que produce el dedo al deslizarse por una pantalla.
Tal cual, el trabajo se titula: “PrintListener: Descubriendo la Vulnerabilidad de la Autenticación de Huellas Dactilares a través del sonido de fricción del dedo”.
La investigación va firmada por científicos de la Escuela de Ciencias e Ingeniería Cibernéticas de la Universidad de Ciencia y Tecnología de Huazhong, de la Facultad de Ciencias e Ingeniería Cibernéticas de la Universidad de Wuhan, del Instituto de Ciencias de la Red y el Ciberespacio de la Universidad Tsinghua, y del Departamento de Informática e Ingeniería de la Universidad de Colorado.
Según el documento donde se publicó su investigación, la técnica funciona al grabar los diferentes sonidos que producen los dedos al tener contacto con una pantalla y generar fricción en ésta.
Lo anterior es posible con ayuda de un micrófono al interior del dispositivo, como el micrófono que tienen todos los celulares. Con éste se captan las señales acústicas de ese sonido que produce el dedo y las graba para convertirlas en un patrón, con el que luego recrea las líneas papilares de la huella dactilar.
“El rango de ataque de PrintListener es extenso. Solo necesita grabar el sonido de fricción de las yemas de los dedos de los usuarios y puede iniciarse aprovechando una gran cantidad de plataformas de redes sociales“, indican los científicos.
“Como elemento de identificación personal, la huella digital se ha integrado en la vida cotidiana de las personas, como en el desbloqueo de la pantalla del teléfono, pagos en línea con huella dactilar, pasaportes electrónicos, etc.
“En consecuencia, se ha generalizado en aplicaciones como la autenticación de usuarios, las plataformas de transacciones en línea, control de acceso y organismos gubernamentales y policiales. Se prevé que el tamaño del mercado de la autenticación de huellas dactilares alcanzará los 99 mil 900 millones de dólares en 2032“.
Esa es la introducción de la investigación antes citada. Y sin duda tienen toda la razón, pues la huella digital se ha convertido en una forma de autenticación bastante común y cada vez más usada. Lo dicho, basta recordar que actualmente es uno de los métodos más usados para el bloqueo de celulares y de apps como la del banco.
La pregunta es: ¿qué tan efectiva es la técnica para vulnerar huellas digitales mediante el sonido? Pues tú dirás: Concluyeron que, tras pruebas en escenarios realistas, PrintListener fue capaz de atacar eficazmente el 27.9% de las huellas parcialmente escaneadas y hasta el 9.3% de las huellas dactilares completas en cosa de cinco intentos.
Puede parecer un porcentaje bajo, pero si recordamos que hablamos de investigaciones preliminares sobre una técnica que puede ser cada vez más sofisticada, entonces sí amerita mayor preocupación.
“Debido a su uso generalizado, la filtración de huellas digitales puede causar robo de información sensible, enormes pérdidas económicas y de personal e incluso un posible compromiso de la seguridad nacional“.
Ahora bien, la investigación no sólo da problemas, también ofrece soluciones… o bueno, al menos medidas para intentar prevenir ser víctima.