Después de mucho trabajar para abrir por completo la cápsula con las muestras del asteoride Bennu, la NASA finalmente muestra una foto de hiper alta calidad de lo que nos trajimos del asteroide.
Y es que vale la pena echarle un ojo porque estamos hablando de una muestra de rocas y suelo de un asteroide. Nada más y nada menos. Esta imagen muestra el momento en que la cápsula llegó a nuestro planeta luego de ser lanzada opr la nave Osiris REX.
Y por acá les contamos cómo se logró esta impresionante hazaña desde que la misión fue lanzada al espacio y qué va a pasar después.
La NASA lanzó OSIRIS-REx el 8 de septiembre de 2016. La nave espacial llegó a Bennu en diciembre de 2018 y luego inspeccionó el asteroide durante más de dos años.
El 20 de octubre de 2020, la nave espacial capturó una muestra del asteroide y la guardó en su cápsula de retorno de muestras. Descendió a la superficie del asteroide Bennu, “aterrizó” por algunos segundos y recolectó una muestra de rocas y polvo.
Esa fue la primera vez que la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio de Estados Unidos tomó muestras de un asteroide.
Poco después, la nave encendió sus propulsores durante 30 segundos e impulsó su trayectoria hacia la Tierra. Pero de esto aprendimos algo increíble: la superficie de Bennu es como una alberca de pelotas y la nave se hubiera hundido si no hubiera encendido sus propulsores para retroceder inmediatamente.
Cuando OSIRIS-REx se acercó lo suficiente de la Tierra, los 250 gramos de rocas y polvo del asteroide cayeron desde una distancia de 102 mil kilómetros.
De acuerdo con las mediciones de la NASA, la cápsula entró a la atmósfera a las 10:42 am viajando a unos 44.4 kilómetros por hora. Los paracaídas ayudaron a que el aterrizaje sucediera a 17.7 kilómetros por hora y tocó tierra unos 10 minutos después.
Como lo mencionamos más arribita, la cápsula aterrizó en el Campo de Pruebas y Entrenamiento de Utah, del Departamento de Defensa de Estados Unidos.
Pero ¿y luego? Hasta el lugar en donde cayó la cápsula llegaron 4 helicópteros con los equipos de recuperación. Revisaron que no hubo daños, verificaron que ya estuviera fría y la aseguraron por completo. La cosa es que durante la reentrada la cápsula resistió 2 mil 760 grados Celsius.
La cápsula fue llevada a una sala aislada cerca del lugar de aterrizaje para darle un bañito de nitrógeno. Esto evita que la contaminación de la atmósfera entre en el bote de muestras y lo contamine.
Cuando finalmente saquen el bote de muestras, lo llevaron en avión al Centro Espacial Johnson de la NASA en Houston. Este es el momento en que el equipo de expertos abre la cápsula, bueno, una parte.
Seguramente se preguntarán por qué no fue la nave espacial la que bajó a la Tierra para entregar las muestras y la respuesta es que la misión aún no ha terminado.
La nave espacial va a continuar con su viaje por el Sistema Solar y ya redirigió su viaje para llegar hasta otro asteroide llamado Apofis. Ahora la misión se llama OSIRIS-APEX.
Este asteroide se acercará a 32 mil 186 kilómetros a la Tierra en 2029 y el plan es que la nave se acerque a su órbita.
El objetivo es estudiar los cambios en el asteroide causados por el sobrevuelo cercano a la Tierra y usar sus propulsores de gas para intentar desalojar y estudiar el polvo/pequeñas rocas sobre la superficie.
Después de que el equipo quitó los sujetadores finales por allá del 10 de enero de este 2024, finalmente el equipo de astromateriales de la NASA tomó una fotografía de las muestras.